EL ESPIRITU SANTO.- El bautismo del Espíritu Santo es la obra por la cual, al momento de la salvación, el Espíritu de Dios une al creyente con Cristo y con otros creyentes en el Cuerpo de Cristo. Fue predicho por Juan el Bautista y Jesús, y se cumplió en el Día de Pentecostés. Primera carta a los Corintios 12:12 al 13 destaca que todos los creyentes han sido bautizados en un mismo Espíritu, indicando que no es una experiencia exclusiva. Romanos 6:1 al 4 expresa la posición del creyente ante Dios de manera similar.
Para reforzar la comprensión, se señala que primera carta a los Corintios 12:13 afirma que todos los creyentes han sido bautizados y han bebido del mismo Espíritu. Además, la Escritura no exhorta a buscar el bautismo del Espíritu, sugiriendo que todos los creyentes ya lo han experimentado. Efesios 4:5 parece referirse al bautismo del Espíritu, confirmando su realidad en cada creyente junto con la fe y la unidad en un solo Dios y Padre.
En resumen, el bautismo del Espíritu Santo une a los creyentes al Cuerpo de Cristo y realiza su co-crucifixión con Él. Estar en Su cuerpo implica una resurrección a una vida nueva. El bautismo del Espíritu establece la base para la separación del poder del pecado y el andar en una vida nueva. Mantener la unidad en la iglesia y ejercer los dones espirituales son aspectos esenciales de esta experiencia.
0 comentarios:
Publicar un comentario